Sorpresa gatuna

Esta mañana, cuando iba al trabajo me encontré una sorpresa no esperada: un pequeño felino me miraba desde una puerta con cara triste. Me acerque con la seguridad de que saldría corriendo en cuanto intentara acariciarlo.
Nada más lejos de la realidad, se quedo quieto, me maulló y pude comprobar que tenia una pata trasera seguramente rota, ya que su aspecto no era muy bueno.

Por suerte para mi (no para el gato, que ya tengo tres en casa recogidos de la calle, y si llevo otro se quedan con el gato y me echan a mi!) había un collar con un número de teléfono, así que me lo lleve a la oficina (por suerte estoy solo yo, el resto de personal está de vacaciones), llamé al propietario y ya lo han recogido (se les escapa y no se habían enterado 8<((( ).
Simpaticote animal, muy cariñoso y ademas, jamas habían pasado por la oficina tantas mozas de otros departamentos!! (nota mental: llevar cada día al trabajo un gato).
Suerte al minino y que se recupere pronto.

Saludos a todos los amantes de los gatos.