Parece mentira, otro año más y de nuevo en diciembre, en puertas de Navidad (o del Solsticio de Invierno o de Saturnalia, que cada uno elija el nombre que prefiere ponerle). Otro año que transcurre de nuevo entre luces y sombras; iniciamos el camino partiendo de la Comarca llenos de ilusión y estamos llegando a las Ciénagas de los Muertos, cansados y deseando unas merecidas vacaciones que a buen seguro llegarán en el verano del próximo año, pero mientras tanto permitirme acabar este 2015 con una antigua plegaria celta que expresa lo que le pido para todos nosotros al nuevo año que ya está cercano a nacer.
Qué el camino salga a tu encuentro, que el viento siempre este detrás de ti y la lluvia caiga suave sobre tus campos, y hasta que nos volvamos a encontrar que los dioses te sostengan suavemente en la palma de sus manos.
Qué vivas por el tiempo que tú quieras, y que siempre quieras vivir plenamente.
Recuerda siempre olvidar las cosas que te entristecieron, pero nunca olvides recordar aquellas que te alegraron.
Recuerda siempre olvidar a los amigos que resultaron falsos, pero nunca olvides recordar aquellos que permanecieron fieles.
Recuerda siempre olvidar los problemas que ya pasaron, pero nunca olvides recordar las bendiciones de cada día.
Qué el día más triste de tu futuro no sea peor que el día más feliz de tu pasado.
Qué nunca caiga el techo encima de ti y que los amigos reunidos debajo de él nunca se vayan.
Qué tengas palabras cálidas en un anochecer frío, una luna llena en una noche oscura y que el camino siempre se abra a tu puerta.
Qué vivas cien años, con un año extra para arrepentirte.
Qué los dioses te guarden en su mano, y no aprieten mucho su puño.
Qué tus vecinos te respeten, los problemas te abandonen y los ángeles te protejan y el cielo te acoja.
Qué tus bolsillos estén pesados y tu corazón ligero.
Y qué la buena suerte te persiga y cada día y cada noche tengas muros contra el viento, un techo para la lluvia, bebidas junto al fuego, risas para consolarte, aquellos a quienes amas cerca de ti y todo lo que tu corazón desee.
Qué los dioses estén contigo y te bendigan, que veas a los hijos de tus hijos y que el infortunio te sea breve y te deje rico en bendiciones.
Qué no conozcas nada más que la felicidad y que desde este día en adelante los dioses te concedan muchos años de vida, de seguro ellos saben que la tierra no tiene suficientes ángeles.
Este año no hemos podido dedicarle mucho tiempo al blog, hemos tenido mucho trabajo (no nos quejaremos, mejor no parar de trabajar que no saber donde poder trabajar), pero siempre hemos intentado haceros llegar por donde estábamos o cuales eran nuestras metas e ideas y, obviamente, no podíamos dejaros de desearos, de parte mia y de toda mi familia:
FELIZ NAVIDAD Y PROSPERO AÑO 2016.
クリスマス おめでとう (Kurisumasu omedetō)
Y ya que este final de año estamos muy "celtas" y poco nipones y frikis para navidad...
Larga y Prospera Vida...=^.^= Niahaha
Imágenes: photos4travel

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